Esta mañana ha tenido lugar en la Plaza de la República Dominicana (o Plaza de la Dignidad) la inauguración del monumento sufragado por cuestación popular en memoria de las víctimas del terrorismo. Porque, increíblemente, en esa plaza no había hasta hoy nada que recordara la infamia y la brutalidad.
Subidos en el estrado había políticos (de un solo partido) apoyando a las víctimas, que estaban presentes por docenas. También estaba Iñaki Ezkerra (¡valiente!), presidente del Foro de Ermua y Santiago Abascal, Presidente de DENAES, la Fundación que ha hecho posible esta preciosa iniciativa. Junto a ellos cientos y cientos de personas anónimas. Mayores, jóvenes, niños…
Del gobierno, que se supone representa a todos los españoles, ni rastro. Es normal. Tampoco se les echó en falta.
Allí estábamos hoy, en el lugar en que sucedió todo. Donde De Juana Chaos, asesino en serie (¿hombre de la paz?) que en pocos meses paserará nuevamente libre por las calles sin haberse arrepentido de ninguno de sus asesinatos, mató en 1986 con un coche-bomba -como el que ha segado la vida hace menos de 72 horas a otro servidor del orden, Juan Manuel Piñuel, a doce jóvenes guardias civiles.
Por ellos y por todas las demás víctimas del nacionalismo vasco asesino. «Para honrar la memoria de las víctimas de terrorismo causadas por los enemigos de España y de la Libertad», como reza la placa al pie del monumento.
Ni que decir tiene que algo tan noble, sufragado de forma voluntaria por la ciudadanía, no interesa lo más mínimo a la gran mayoría de los medios de comunicación. Esos están a otras cosas.
Es la libertad de expresión, idiotas 
Preciosa escultura, muchas gracias por publicar estas fotos.